AUTOR: Tor Idhammar, TRADUCCIÓN POR: JULIO FLORES, PABELON 01 AGOSTO 2023
Artículo original: Can Technology Replace Reliability Best Practices?
¿Alguna vez has visto Rocky IV? En esta exitosa película de 1985, Rocky, un boxeador estadounidense interpretado por Sylvester Stallone, es desafiado a luchar contra un oponente ruso rudo y duro que parece tener todas las probabilidades a su favor.
En preparación para la pelea, Rocky viaja a la Unión Soviética para entrenar hasta la cintura en la nieve siberiana usando solo lo esencial. Mientras tanto, a su oponente, Ivan Drago, se le dan todas las ventajas en el libro, incluido un equipo de expertos que miden y registran cada una de sus acciones y cambios físicos con lo que parece ser una tecnología similar a la de la NASA para ese día y edad.
Pero contra todo pronóstico, y algunas de las mejores tecnologías de la época, Rocky derrota a su oponente y una vez más asegura su título de campeón, debido en gran parte a su excepcional comprensión de los principios fundamentales del boxeo, su estilo de preparación resuelto y su dedicación inquebrantable a su entrenamiento.
Si bien Rocky IV es una obra de ficción, destaca una valiosa lección de vida que debería resonar con todos nosotros. Las tecnologías, como los sistemas de gestión de mantenimiento computarizado (CMMS) y la inteligencia artificial (IA), pueden ser excelentes recursos para impulsarlo a mayores niveles de éxito dentro de su empresa y la industria, pero estas herramientas pueden convertirse fácilmente en su caída sin la capacitación adecuada y el dominio de las mejores prácticas de mantenimiento y confiabilidad.
Casos prácticos: Implementación de tecnología fallida
Caso práctico #1: Solución de CMMS
Una compañía con la que estoy trabajando actualmente está en el proceso de actualizar el programa de CMMS de sus instalaciones. Creen erróneamente que el nuevo software por sí solo resolverá todos los problemas que enfrenta actualmente su programa de mantenimiento y confiabilidad. Estas cuestiones incluyen:
- Mala priorización de las órdenes de trabajo
- Mala planificación de las órdenes de trabajo
- Falta de ejecución y documentación de mantenimiento preventivo
- Una lista de materiales incompleta
- Una gran acumulación de trabajo
- Alto costo de mantenimiento
- Poca confiabilidad
El precio de su solución de CMMS elegida es de más de 10 millones de dólares. A esta escala, la implementación fallida tendría un efecto dominó negativo severo y podría causar:
- Un cambio de enfoque, asignando muchos recursos para solucionar el problema de la CMMS en lugar de mejorar la confiabilidad en la fábrica.
- Un sistema que ralentiza el proceso de órdenes de trabajo de mantenimiento.
- Personas no capacitadas que deciden no usar el sistema.
- Problemas para recuperar piezas de repuesto.
- Un cambio de actitud que podría conducir a una fuerza de trabajo descontenta
- Altos costos de administración del sistema y los datos
Estos problemas no solo representan una amenaza real para los resultados actuales de la compañía, sino también para su potencial de éxito para las generaciones venideras.
Estudio de caso #2: Solución de IA
Un sitio de molino con el que trabajé anteriormente asignó millones para instalar una solución de IA que monitorearía y proporcionaría un análisis estadístico de la temperatura del equipo y los niveles de vibración. Lo que no consideraron es que las soluciones de IA deben tener una fecha limpia y precisa, y luego recibir capacitación sobre qué monitorear antes de que puedan funcionar de forma independiente. Como resultado, su nuevo sistema generó un número abrumador de alertas.
De hecho, cuando el sistema entró en funcionamiento por primera vez, se generaron tantas alertas que el sitio habría necesitado más del doble de su personal de mantenimiento para resolver todos los problemas y verificar las alarmas adicionales. Además de esto, debido a que el sitio estaba tratando de implementar la solución de IA para resolver sus problemas, no para lograr sus objetivos, todavía tenían una gran acumulación de trabajo que debía completarse, pero no podía ser porque la administración no aprobaría el presupuesto necesario para cubrir los costos de reparación.
Simplemente creyeron que el equipo de monitoreo digital de IA era una gran idea, pero no habían considerado cómo el monitoreo de condición adicional afectaría el resto del proceso de trabajo o si la tecnología generará un retorno de la inversión (ROI).
El resultado fue una acumulación aún mayor de trabajos de mantenimiento y una factura colosal de Amazon para almacenar todos sus nuevos datos.
Establecer primero los fundamentos de mantenimiento y confiabilidad
La tecnología es una herramienta, no un sustituto de las buenas prácticas. Si bien puede acelerar las mejoras de mantenimiento en su organización, nunca puede ser una mejora real por sí misma. Si quieres que algo mejore, debes hacer el trabajo y hacerlo bien.
En este momento, parece que nosotros, como industria, hemos olvidado por completo este hecho. Parece haber una fe ciega en la tecnología. Desde ferias comerciales y medios de comunicación hasta expertos en la materia y proveedores de soluciones, parece que hay una tendencia creciente a promover indiscriminadamente los últimos sensores, software y aplicaciones sin considerar primero si generarán un buen retorno de la inversión o qué deben tener nuestras instalaciones para que estas herramientas tengan éxito. Esto no solo se presta a la suboptimización, sino que pone en riesgo todo el futuro de nuestras empresas.
Para tener la oportunidad de implementar tecnologías con éxito, una instalación primero debe:
- Buenas prácticas de trabajo en mantenimiento preventivo, planificación, programación, RCFA y gestión de materiales
- Datos maestros precisos, como números de equipo y lista de materiales.
Una vez que estos se implementan y son una parte solidificada de la cultura de mantenimiento y confiabilidad de nuestras instalaciones, podemos evaluar si las soluciones proporcionarían un ROI favorable. Los factores que determinan si una inversión proporcionará un buen retorno de la inversión incluyen si:
- Hacer que la fuerza laboral sea más eficiente.
- Reducir el número de fallos en la planta.
- Prolongar la vida útil del equipo.
- Reduzca los costos a través de la automatización.
Cuando comience a implementar estas nuevas tecnologías en sus instalaciones, es crucial recordar que no están destinadas a resolver sus problemas, sino que están diseñadas para ser utilizadas de una manera que lo ayude a alcanzar sus objetivos. Estos objetivos deben ser claramente definidos y entendidos por todas las partes interesadas antes de la implementación de la tecnología, de lo contrario, está gastando el valioso capital de la empresa en una herramienta que solo creará más problemas.
Ejemplos de objetivos de instalaciones que las tecnologías pueden ayudarle a alcanzar incluyen:
- Mejore la fiabilidad general.
- Reducir costes.
- Haga que la fuerza laboral sea más feliz.
- Aumentar la velocidad y la precisión en la ejecución de tareas.
Debemos tener cuidado de no ser víctimas de la creencia de que la tecnología por sí sola resolverá todos nuestros problemas. Primero debemos implementar prácticas y procedimientos sólidos de mantenimiento y confiabilidad antes de invertir nuestro tiempo y recursos; Si hacemos esto, la tecnología puede ser una gran herramienta para ayudar a acelerar la mejora y el crecimiento. De lo contrario, nos veremos obligados a mejorar los procesos con el presupuesto de capital que quede después de la inversión en tecnología, que a menudo no es nada.
Para lograr una instalación exitosa y confiable, necesitamos hacer el trabajo, al igual que Rocky. No confíe en la tecnología o la transformación digital para solucionar todos sus problemas. Domine los conceptos básicos y utilice la tecnología para lo que es: una mejora en lugar de una solución.
Artículo original: Tor Idhammar President & CEO, I. (2023). Can Technology Replace Reliability Best Practices? Retrieved 31 July 2023.
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